El carácter inquisidor del morenismo
Adrián Salazar
El Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral,Lorenzo Córdova presentó en la Cámara de Diputados el presupuesto que el INE ha requerido para sus actividades del próximo año en atención a la invitación realizada por estos legisladores. El consejero presidente señaló que este acto contribuye a la democracia la cual –dijo- es una de las inversiones públicas más importantes y que más ha retribuido.
El eje central de esta “comparecencia” era la discusión sobre el financiamiento público para partidos políticos, consulta popular y revocación de mandato que conforman la solicitud de “partida precautoria” del INE y así justificar los recursos que ha planteado en el Presupuesto de Egresos 2022, los cuales se dividen así: 1) mil 913 millones 125 mil 708 pesos para consulta popular, 2) cinco mil 821 millones 851 mil 704 pesos para partidos políticos y 3) tres mil 830 millones 448 mil 91 pesos para proceso de revocación de mandato
El monto global solicitado para el próximo año asciende a casi 24 mil 650 millones de pesos.
Sin embargo, lo que debió haber sido un ejercicio democrático terminó siendo un acto de lapidación pública; la Cámara de Diputados se convirtió en el patíbulo del representante de la máxima autoridad electoral, donde los representantes de Morena y allegados se convirtieron en jueces de la moral, dejando de lado el verdadero eje de dicha comparecencia, es decir, el debate se centró en reclamos de los legisladores que acusaron al INE de ser un organismo imparcial, neoliberal y de “pretender asumir funciones del Congreso mediante acuerdos”, además de los reclamos por fraudes electorales, acusaciones de autoritarismo, señalando altos sueldos de consejeros y poniendo en tela de juicio la autonomía del INE.
Veamos pues, algunos de los argumentos de los fieles seguidores del morenismo. El diputado por el PT, Gerardo Fernández Noroña, dijo sarcásticamente que Lorenzo Córdova era bienvenido y podía hablar “sin mordaza”, a diferencia de lo que el INE ha hecho con sus resoluciones: el INE no es Lorenzo Córdova, es un órgano autónomo que no es un poder por encima de los poderes de la República como ellos se creen, dijo. También mencionó que los consejeros del INE “cobran 300 mil pesos mensuales, tan tranquilamente, cobrando tres veces lo que el compañero presidente de la República”.
Sin embargo, el salario mensual de los consejeros es de 178,058 pesos, mientras que el presidente recibe 112,646 pesos, según cifras de la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT), lo que revela que no es “tres veces” lo que recibe el mandatario federal. Por su parte, al cuestionamiento de si el tema del salario es inconstitucional o ilegal que consejeros ganen más que el presidente de la República, Córdova mencionó que es un tema que quedó a discusión en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), ante los amparos y acciones contra la ley de remuneraciones de 2019. En ese año, la Suprema Corte ordenó no aplicar dicha ley, mientras se dictaba sentencia sobre el caso.
Por su parte, Juan Ramiro Robledo, representante de Morena en el recinto legislativo dijo que les parece excesivo el presupuesto que pide el INE para 2022 y adelantó que el partido buscará una reforma electoral, mientras que su compañera Graciela Sánchez lapidó argumentando que –el INE- “ha pretendido una y otra vez pasar por encima de la ley y manipularla a su beneficio y su resistencia a la Consulta Popular así lo confirma. Por eso desde esta tribuna y asumiendo la voluntad de los mexicanos, le decimos de cara a la sociedad nacional, la Revocación de Mandato va, porque el pueblo pone y el pueblo quita”.
Pero precisamente el INE ha solicitado una partida precautoria por más de 5 mil millones de pesos, de los cuales, mil 913 millones corresponden a una posible consulta popular que aún podría ser promovida por el Ejecutivo, por alguna de las Cámaras o por la ciudadanía; y 3 mil 830 millones para organizar la primera consulta de revocación de mandato en la historia del país, si así lo decide el 3% de las y los ciudadanos inscritos en la Lista Nominal, lo cual se contrapone a la acusación de los legisladores morenistas.
No obstante, pese a la incesante lluvia de descalificaciones salió a la luz que Morena incumplió su promesa de donar este año el 50% de sus prerrogativas para la adquisición de vacunas contra el covid-19, al igual que la promesa del 2017, cuando supuestamente donarían la misma cantidad para los damnificados del sismo, pero no sólo ellos, el PT también incumplió su promesa de donar la mitad de sus ingresos para la compra de vacunas, esto le valió al titular del INE calificativos como traidor, bravucón, lengua larga, mentiroso, farsante, entre otros.
Este vergonzoso capítulo en la democracia moderna “encabezada” por Morena y su autodenominada “cuarta transformación” se suma a una serie de ataques previos desde el partido en el poder, lo que hace cada vez más innegable el choque frontal del gobierno federal contra los organismos independientes, el cual puede interpretarse como una incesante empresa para concentración de poder en manos del Ejecutivo, lo cual conlleva, implícitamente, un detrimento a la democracia.
Tiempo atrás, tanto López Obrador como los cuadros de Morena, han manifestado querer implementar una reforma al INE, incorporando al nuevo órgano electoral (resultado de esa supuesta reforma de fondo), al organigrama del Ejecutivo, bajo la premisa de la imparcialidad y el ahorro de presupuesto, es decir, quitando su autonomía para ser un subordinado más. Así pues, con lo acontecido en esta comparecía del INE ante la Cámara de diputados queda revelado el carácter inquisidor del morenismo.